Siguiendo la lectura de Fernández, el aprendizaje e-learning al igual que en la modalidad presencial aparece la figura del docente y del estudiante, pero dentro por supuesto de un entorno virtual.
En este entorno, además participan o deben participar otras figuras como directores de proyecto, planificadores de la acción formativa, pedagogos-tecnólogos de la educación, programadores informáticos, diseñadores gráficos, técnicos y administradores, esto puede darnos una idea de que “armar” un entorno virtual de aprendizaje quizás lleve un trabajo previo importante. Aquí que también que encontramos diferencia con lo que nos tocó atravesar este último tiempo debido al aislamiento preventivo, donde los entornos creados o donde la educación fue de emergencia.
Otra de las cuestiones a las que hace referencia el autor tienen que ver con los procesos de comunicación entre el tutor y los estudiantes y el proceso de interacción, considerados como procesos clave dentro de la función que debe desarrollar el tutor.
El tutor ya no se limita a transmitir conocimientos, sino que adopta un rol totalmente distinto debido a que en este tipo de enseñanza el estudiante realiza un papel de aprendizaje de una manera más autónoma.
Por otra parte, me parece también importante resaltar las competencias que debe tener el tutor, las cuales son competencia tecnológica, didáctica y tutorial y que abre a lo que se refiere las funciones del tutor: académica, psicopedagógica y personal. Hay una reprofesionalización del docente.
Siguiendo finalmente al autor Fernandez, es significativo el nuevo rol del estudiante. Me parece importante y además nos puede ser útil a los docentes, realizar lo que García Aretio et al. (2006) plantean: la necesidad de que se realice un análisis diagnóstico previo para conocer cuál es la situación real e inicial, las necesidades e intereses formativos del alumnado al que se dirige la acción formativa con el fin de adaptarla y poder así satisfacer sus exigencias.
Para anexar, coincido en lo que Javier Martinez marca como dos aspectos fundamentales: ofrecer feed-back y manejar y reforzar relaciones entre personas. Creo independientemente del entorno (virtual-presencial) que son dos cuestiones que el docente tutor tiene que velar por mantener, ya que ayuda a la construcción del conocimiento, fomenta la interacción, el aprendizaje continuo y mejora o fomenta la buena relación entre las partes.
Nos seguimos leyendo.
Paola.