Me parece muy interesante retomar la idea de mi compañera Mirta, sobre el hecho de “pasar de un profesor transmisor de conocimientos a un mediador de la tarea de aprender” y que esto a su vez llevará al cambio de un estudiante “receptor” a un estudiante “constructor” de su propio aprendizaje.
No resulta este un camino fácil, se requiere de un cambio en el proceso enseñanza –aprendizaje un cambio de paradigmas. Esto implica un cambio en las estrategias del proceso de enseñanza que faciliten la adquisición, la retención y la recuperación del conocimiento.
En este sentido es que podemos hablar de metacognición, según Flavell (1976) ésta se "refiere al conocimiento que uno tiene sobre los propios procesos y productos cognitivos, o cualquier otro asunto relacionado con ellos... La metacognición se refiere, entre otras cosas a la supervisión activa y consecuente regulación y organización de estos procesos en relación con los objetivos cognitivos sobre los que actúan, normalmente al servicio de una meta u objetivo concreto". (Bara 2005)
Para lograr el desarrollo de la metacognición en los estudiantes debemos pensar en una concepción, del tipo aprender a aprender, que hace hincapié en la idea del aprendizaje entendida como actividad personal, centrada en la búsqueda de significado, de la plena comprensión. (Bara 2005)
La metacognición, como definición clásica se refiere a dos dominios: conocimiento de los procesos cognitivos y regulación de los mismos, para ello debemos identificar estrategias que permitan retener información, usar diferentes técnicas que mejoren las fortalezas y que permitan al estudiante reflexionar sobre su progreso en el aprendizaje.